La superficie de los cultivos hortícolas con mayor demanda de mano de obra y con problemas de sanidad vegetal ha disminuido en la Comunidad Valenciana en los últimos trece años en un 60%, indicó ayer La Unió-COAG.

La organización señaló que esta disminución en la superficie cultivada, unida a su baja rentabilidad, ha provocado que el abandono de la actividad sea "constante".

En el caso de la judía verde, la superficie se ha reducido un 80%, la de tomate alcachofa y haba verde ha disminuido un 70, 60 y 62%.

La superficie cultivada de lechuga también ha bajado un 41%, la de melón un 52%, la de pepino un 56% y la de pimiento un 72%.

Según La Unió, este descenso se debe a la falta de rentabilidad de las explotaciones, que en el año 2002 llegó a ser un 5% más baja incluso que el ejercicio anterior.

También está motivado porque requieren mucha mano de obra para su cultivo, que "año tras año ve incrementado su coste económico", que se ha cifrado en un 3,2% en el 2003, "situación totalmente inasumible por el agricultor al no verse compensado con el precio de venta de su producto".