Los transportistas de Castellón y Valencia dedicados al porte de áridos a las empresas azulejeras de la provincia denunciarán ante la Conselleria de Transporte a las empresas que "no contemplen la subida del 5% en sus tarifas o la camuflen, permitiendo excesos de peso", según explicó ayer Manuel Tarrazona, secretario general de la Asociación Española de Transportistas Autónomos de Valencia (Asetraval), después de una reunión celebrada ayer por los miembros del colectivo.

Esta medida, que pretende acabar con la competencia desleal que sufre el sector y paliar el perjuicio de la subida del gasoil, --inferior al incremento de las tarifas--, será efectiva desde el próximo 20 de diciembre. Pero antes de llegar a este extremo, los transportistas comunicarán los resultados de la reunión a la Asociación Castellonense del Transporte (ACTM) para "exigir a Ascer que avise a los asociados que están realizando estas prácticas ilegales". "Si el día 15 de diciembre continúan las anomalías, iremos a hablar con las empresas para ver si las conversaciones dan su fruto". En caso de que estas medidas no acaben con el problema, los transportistas solicitarán ayuda a la inspección de la Conselleria.

UNA NUEVA ASOCIACIÓN Con el fin de que los transportistas de tierras y arcillas a granel tengan una plataforma para realizar mejoras estructurales, viarias y organizativas en el sector, los cargadores crearon ayer la Asociación de Empresarios del Transporte de la Serranía. Una entidad que "pretende coordinar las prácticas mercantiles de los transportistas, tanto de Castellón como de Valencia, que abastecen a las atomizadoras".

En lo que se refiere a la subida definitiva de las tarifas de estos cargadores, Tarrazona reiteró que las negociaciones con Ascer "continuarán en enero cuando se conozca la subida del IPC, del gasóleo y el gas natural".