Las declaraciones del obispo de Segorbe-Castellón, Juan Antonio Reig Pla, respecto a la homosexualidad y los programas de educación sexual de los centros docentes recibieron ayer la condena unánime de diversos colectivos de profesorado, que lo calificaron de sectario y poco objetivo.

El portavoz de la Asamblea de Directores de Instituto de Castellón, José Martí, le reclamó que sea "más objetivo al referirse a la enseñanza pública". "La Iglesia no puede pretender que toda la sociedad actúe según sus principios y su forma de entender la sexualidad, que es muy respetable pero no tiene por qué ser la única en esta sociedad aconfesional". Martí dijo que la educación sexual se imparte en los centros de acuerdo con criterios científicos y que, precisamente, el problema es que el currículo actual no concreta lo suficiente la educación sexual; debería concretarla más.

Para el portavoz del sindicato STE-PV, Manel Collado, "está claro que él no ha asistido nunca a ninguna clase de educación sexual de la escuela pública". Indicó que sus declaraciones respecto a la homosexualidad muestran cuáles son las obsesiones del obispo. Para Collado, sus declaraciones demuestran "que tenemos razón al decir que los dogmas religiosos no pueden entrar en la escuela".

Por su parte, el portavoz de FETE-UGT, Laure Puig, manifestó que con esta "cruzada" Reig Pla demuestra "su sectarismo e intolerancia". Indicó que "en una sociedad libre y democrática deberían ser tolerantes aunque no compartan el mismo criterio" y que "la orientación sexual forma parte de la libertad individual de la persona".

También los partidos de la oposición criticaron a Reig Pla. La portavoz adjunta del Grupo Socialista en las Cortes Valencianas, Isabel Escudero, manifestó su "repulsa e indignación" por las declaraciones "homófobas y retrógradas" de Reig Pla. Los "gobiernos democráticos no deben permitir que la discriminación forme parte de los sistemas educativos", afirmó. La diputada socialista Carmen Montón pidió a la Iglesia que "deje de crispar a la sociedad" y que cuando hable de la homosexualidad lo haga "con respeto".

BLOC Y PP Por su parte, el concejal del Bloc Enric Nomdedeu dudó de que "el señor obispo pueda discutir de tú a tú con los responsables de la OMS respecto a la eficacia del preservativo en la prevención de ciertas enfermedades". Apuntó que el obispo debería ir a rezar y a pedir perdón por las "barbaridades" que está diciendo. "Es una irresponsabilidad inaceptable sabiendo la repercusión que tienen sus palabras".

En cambio, el diputado provincial del PP Miguel Ángel Mulet apuntó: "Al margen de mi personal y particular interpretación que pueda dar a los temas, manifiesto mi total respecto a sus palabras".