El plan de choque diseñado por la sanidad valenciana pretende poder someterse a una intervención quirúrgica "antes de 45 días" desde que lo prescribe el doctor y no esperar más de "10 días" para acudir a una consulta de especializada o para someterse a algún tipo de prueba diagnóstica.

Unos objetivos que, según Sanidad, podrían cumplirse "a finales del 2006", siguiendo al pie de la letra cada una de las directrices que plantea el Plan de Garantía de No Demora.

Las medidas para reducir las esperas son mejorar y desarrollar sistemas de información; mejorar el registro centralizado de pacientes en espera; implantar de forma progresiva el sistema de información ambulatoria (Abucasis II); y crear herramientas para monitorizar la actividad en tiempo real.

Otras propuestas pasan por mejorar el rendimiento de los recursos y aumentar las plantillas en las especialidades con mayor demanda.