La celebración de la Fiesta de Andalucía se adelantó ayer en Castellón por la coincidencia, este año, de la Magdalena con el día 28 de febrero. De esta forma, los andaluces de la provincia demostraron que siguen rindiendo homenaje a su tierras pero que "han tirado raíces en La Plana".
Los actos, organizados por el Centro Cultural Andaluz de Castellón, tuvieron lugar en la sede de la entidad, en el antiguo acuartelamiento Tetuán 14 con un vino de horno, servido por un venenciador y las actuaciones del Rincón Amigos del Flamenco y los Cuadros de Baile y Coro rociero del centro. Antes, se recitaron las Semblanzas sobre Andalucía, que este año corrieron a cargo de Antonio Escuin.
Diversas autoridades municipales y autonómicas acudieron a la cita en la que el vicepresidente del centro, Antonio Fernández, leyó unos poemas de Blas de Infante, en nombre del presidente, Antonio Pino, que no pudo acudir por temas laborales.
La familia andaluza castellonense dedicó también un minuto de silencio al recuerdo del presidente de la Peña Luis de Córdoba de Almassora, Juan Marín, fallecido recientemente.
Para Antonio Fernández, la provincia de Castellón ha sabido "acoger a los andaluces y muestra de ello es que la mayoría seguimos viviendo aquí, nuestros hijos se han casado con castellonenses y ahora, nuestros nietos, son castelloneros. Fernández considera que la mayoría del colectivo andaluz lleva en La Plana "una media de 25 años" y apunta que tuvieron que dejar su tierra "por motivos laborales". Aquí, sus trabajos llegaron de la mano de la industria azulejera.
Además de esta fiesta, el Centro Andaluz participa activamente en multitud de actos a lo largo de todo el año.
