El PP dio ayer luz verde, en solitario ya que el PSOE votó en contra y el Bloc se abstuvo, a los presupuestos del Ayuntamiento de Castellón para el 2006. Unas cuentas que ascienden a más de 154 millones y que fueron aprobadas en un agrio y tenso debate. En éste, la concejala de Hacienda, Susana Fernández, desveló que el PP habrá invertido en Castellón 82,3 millones de euros en infraestructuras en los cuatro años de esta legislatura, al recordar que el consistorio "ha realizado una gestión buena".

Después de que el portavoz del Bloc, Antoni Porcar, argumentara que se trata de unos presupuestos que "no solucionan los problemas", Fernández, hacía referencia a que el Estado no ha "dado ni un euro a la ciudad desde hace dos años". Así respondía la edil a la denuncia del socialista Ignacio Subías, quien aseguraba que la Generalitat "ha abandonado a Castellón", después de denunciar que las nuevas cuentas "no se basaban en necesidades reales".

En el pleno, Porcar también aconsejó a Fernández que no le diera lecciones sobre los presupuestos "porque no tiene capacidad para hacerlo", después de que la concejala le hiciera una puntualización. El ambiente tuvo su punto álgido en la intervención del portavoz del PP, Miguel Ángel Mulet, quien destacó "la incapacidad de Subías y de sus colaboradores, ya que dos de ellos, Peralta y Alcalde, fueron suspendidos de sus cargos en el puerto y en el hospital".