El subdelegado del Gobierno en Castellón, Juan María Calles, descartó ayer que los centros escolares de Castellón se hayan convertido en un punto neurálgico de tráfico de drogas al menudeo. Una actividad delictiva que el pasado 14 de diciembre fue denunciada por la coordinadora de Asociaciones de Vecinos, que solicitaba más presencia policial a la entrada de los colegios e institutos de la capital.

En este sentido, Calles reconoció que la policía tiene constancia de que hay "determinados puntos" de Castellón en los que se produce venta de droga al menudeo, pero es "una situación controlada y en ningún caso hay operaciones de calado que impliquen a menores ni en tráfico ni en menudeo de droga dentro de los centros", dijo.

El subdelegado afirmó que, en este caso, "se está mezclando la conflictividad escolar creciente con otras cuestiones que no competen a la actividad escolar" y confió en el buen hacer de los directores y orientadores escolares "que darán mejor respuesta que la policía a las faltas de los alumnos", señaló.

A su vez, el subdelegado explicó que la Junta Provincial de Seguridad celebrada ayer aprobó el desarrollo de un nuevo plan provincial para combatir el tráfico minorista y consumo de drogas en zonas de ocio, que se llevará a cabo en los próximos meses. El dispositivo contempla un mapa provincial con aquellos lugares en los que pueda producirse tráfico de drogas, que será estacional, ya que en verano el trapicheo "se localiza en locales de playa y en invierno en el entorno de macrodiscotecas", dijo.

Calles también explicó que, por ahora, "no se ha detectado en la provincia actividad de bandas armadas ni de grupos violentos juveniles". Pese a ello, aseguró que se mantendrá un plan preventivo, puesto que "somos conscientes de que el Levante español es una zona propensa a estas actividades".