Javier Peris es otro de los fijos en la carrera por renovar la alcaldía en el 2007. Fue una de las sorpresas en las anteriores elecciones municipales. Logró convencer a un sector crítico y pasó de ser un candidato que se estrenaba en política a ganar al PP, que llevaba dos legislaturas gobernando, por mil votos de diferencia. Eso le valió la recompensa de un escaño en la Diputación provincial.