Solo dos paranys de la provincia tendrán bula de la Conselleria de Territorio para cazar este año. Eso sí, la finalidad no será cinegética, sino científica, para comprobar la viabilidad del nuevo adhesivo ecológico que, a medio plazo, podría abrir las puertas a autorizar de forma general esta modalidad tradicional.
El presidente de la Federación Valenciana de Caza, Juan Quiles, detalló ayer que la directora general de Medio Natural, Concha Maroto "recibió, en la última reunión de la comisión de caza, la propuesta de qué paranys servirán para la investigación".
Desde Apaval indicaron que "hemos solicitado que autoricen 8 paranys --además de otros 8 de reserva-- en toda la Comunitat. Así, en la provincia hemos pedido que sean uno de Onda y otro en les Useres", dijo su presidente, Pascual Batalla.
Se trata de los primeros análisis prácticos que se realizarán sobre el nuevo producto, aunque los expertos de la Politécnica también evaluarán la edad de las aves migratorias, entre otros puntos. Estos paranys experimentales, que la Conselleria confirmará la semana próxima, empezarán su labor investigadora el día 4 de octubre y su permiso finalizará el 30 de noviembre.
SEQUÍA Y ESPECIES Pocos días después de que estos paranys inicien su trabajo, arranca la época de caza en general, el día 12 de octubre. En este sentido, Quiles detalló que "la sequía incidirá negativamente sobre los cotos que no aplicaron los planes técnicos" y añadió que "en el resto podrá haber un volumen de caza normal, como este año".
En este sentido, desde la fundación Natura, su presidente, Ricardo Medem, afirmó ayer que "la Federación de Caza de España es muy respetuosa con el medio ambiente".
