Una conducción de seis kilómetros de longitud permitirá llevar el agua de la depuradora de Castellón hasta la cota 100 para su uso por la Comunidad de Regantes del pantano de María Cristina, cuyos usuarios podrán hacer uso de un caudal de 15 hectómetros cúbicos al año, lo que equivale prácticamente a una quinta parte del derogado trasvase del Ebro.

La obra, que está a punto de licitar la Conselleria de Agricultura, supondrá una inversión de 8.394.538 euros y se engloba en el Plan de Obras para la Mejora y Modernización del Regadío. Dispondrá de una estación con tres bombas centrífugas que impulsarán el agua para salvar un desnivel de 85 metros, ya que la depuradora se sitúa en la cota 15 y la balsa receptora en la cota 100.

La tubería discurrirá paralela al barranco de Fraga y luego virará hacia la cabecera del pantano de María Cristina. La superficie total que abarca será de 1.667 hectáreas y habrá 2.553 agricultores beneficiados, según las estimaciones de que dispone la Conselleria de Agricultura.

OPTIMIZAR RECURSOS El objeto del proyecto es optimizar la gestión de los recursos hídricos mediante el aprovechamiento del agua de la estación depuradora de Castellón, que se pierde durante gran parte del año, así como evitar una sobreexplotación de los recursos subterráneos.

El presidente de los regantes de Castellón, José Pascual, asegura que la infraestructura permitirá impulsar "unos 45.000 metros cúbicos al día, lo que supone unos 15 hectómetros cúbicos al año". Pascual incide en el aprovechamiento de los recursos, "ya que el agua de la estación depuradora de Castellón solo la utilizamos en verano y el resto del año va a parar al mar". Con esta actuación, "el agua se utilizará para riego los 365 días que tiene el año".

DERECHOS Además, se prima a una comunidad de regantes con menos derechos históricos que otras, ya que solo puede disponer de agua cuando los pantanos del Mijares presentan un determinado nivel de caudal. Por debajo del tope marcado, los agricultores de esta zona han de recurrir de manera exclusiva a las aguas subterráneas.

José Pascual manifestó que obras de este tipo demuestran "la voluntad inequívoca de sacar lo máximo de nuestros recursos". El también concejal del PP en el Ayuntamiento de Castellón insistió en la necesidad del trasvase del Ebro a la provincia de Castellón, "ya sea para un uso agrícola o turístico, porque con los recursos actuales no está garantizado el futuro".