La dirección la asumirá la orden de las Siervas de la Pasión, que lleva la Casa Cuna de Valencia, un centro que, según sus responsables, tiene como finalidad la "defensa de la vida, especialmente la del no nacido, acogiendo a la mujer para que viva su embarazo con dignidad posibilitándola a una formación integral, dándole apoyo moral, psicológico y social". Además, la obra de Castellón contará con el apoyo de Bancaja.