Los rumanos afincados en Castellón están pidiendo préstamos, tanto a la banca española como a la del país del Este, para poder adquirir pisos en Rumanía. El menor precio de la vivienda y las oportunidades de crecimiento del mercado propician esta situación. De hecho, ya hay varias empresas operando en la provincia que ofrecen intermediación financiera para poder adquirir viviendas allí con nóminas y contratos firmados en Castellón e inmobiliarias que ofrecen pisos en el mercado exterior.

De hecho, muchas oficinas españolas están concediendo financiación para invertir, según indicaron entidades financieras consultadas. Los préstamos concedidos, según indican, son personales, lo que implica cantidades que oscilan entre 30.000 ó 40.000 euros a pagar en seis o siete años. Además, se les piden "garantías" como avales de residentes en España, entre otras.

La presidenta de la Asociación Rumana de Castellón, Valencia y Alicante, Nicoleta Mitulescu, explicaba, además, que "personas con nómina de Castellón pueden pedir financiación en Rumanía". Aclaró que, de hecho, se está trabajando con bancos de allí que ofrecen posibilidades de financiación para la posterior adquisición de los inmuebles. De hecho, ya hay algunas empresas que brindan estos servicios en el mismo Castellón. Este tipo de firmas se encargan de tramitar y gestionar todo el papeleo.

CONTRATO EN CASTELLÓN Es el caso de Credirom Financiera. Su responsable, Oana Nitu, explica que, a través de la la banca de Rumanía, con una nómina de Castellón y un contrato indefinido, se puede comprar un piso a través de un préstamo personal, un crédito hipotecario o un sistema denominado leasing.

"Algunos bancos se han dado cuenta de que hay muchos rumanos que trabajan fuera y ganan más de mil euros al mes, nóminas bastante altas para el país del Este. En Rumanía se puede comprar un piso por 60.000 ó 70.000 euros, cuando aquí es bastante difícil hacerlo por esta cantidad", indicó. "Hasta que Rumanía entre en la UE se puede comprar bien, pero hay que darse prisa porque pueden subir los precios", dijo.

Esta responsable explica que "si se tiene una nómina de 1.000 euros se puede comprar un piso por 50.000 pagando 300 euros al mes a 20 ó 25 años". El inconveniente son los altos tipos de interés, de un 7%, que pide la banca rumana. Sin embargo, matizó, aunque será alto los dos primeros años, tras la entrada en la UE, luego se espera una bajada de los mismos al 3 o al 4%. Nitu argumentaba que los rumanos son reacios a acudir a la banca española porque les "ponen bastantes pegas" para la obtención de financiación y por el hecho de sentirse extranjeros, aunque matizó que algunas oficinas han empezado a sacar folletos en rumano y a contratar personal de este país.

Además, han surgido inmobiliarias como Europa Center que ofrecen pisos en todo el mundo, incluso países como Rumanía.