"Los rumanos y búlgaros hacen cola en Castellón para obtener la tarjeta de identificación porque no se creen al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero".

Así de contundente se mostró ayer ante el colectivo de inmigrantes, en la sede del PP, el diputado Miguel Barrachina, quien reconoció que ese documento no les hace falta para regularizar su situación en España, ya que desde el 1 de enero del 2007 "sus pasaportes les permiten circular libremente con 27 países de la Unión Europea. Pero, como el PSOE ha hecho un mal proceso de regulación, con una moratoria laboral, estos inmigrantes creen que esos papeles son necesarios".

Barrachina insistió en que "por el bien de vosotros --al dirigirse a los allí existentes-- hay que luchar contra los riesgos que ya se han producido en países como Francia y Alemania, porque en España ya amenazan nubarrones".

En este sentido, el diputado del PP les alertó de que los centros de acogida en la frontera sur "están saturados, y algunos, sin agua ni luz; que ya han desaparecido 3.000 subsaharianos, y que ya han entrado en España 1,5 millones de inmigrantes después del anuncio de barra libre".

Barrachina añadió que, según el CIS, "6 de cada 10 españoles consideran un problema la inmigración".