El aumento incontrolado de los precios del gasóleo se ha convertido en un gran lastre para el crecimiento de las empresas del transporte de la provincia que aúnan un total de más de 74.500 furgonetas y camiones. Tal y como destaca el secretario general de la Asociación Empresarial Castellonense de Transportes de Mercancías (ACTM), José Ramón López, "el carburante ya supone un 30% de los costes de las empresas y tiene prácticamente el mismo impacto que los salarios". Se trata de un porcentaje que considera "excesivo", pues, "si se le añaden el resto de partidas que asumimos, queda poco para beneficios".

Y es que, en solo un año, el litro de gasóleo ha aumentado una media de 0,2115 euros, prácticamente el doble que la gasolina sin plomo 95, y ya se paga a 1,1365 euros. Se trata de una cantidad que desde el sector califican de "histórica" y que ha hecho que llenar los depósitos diésel sea más caro que los de gasolina. En concreto, en las estaciones de servicio castellonenses más caras, el litro de gasoil se paga a 1,169 euros, mientras que la sin plomo se cotiza a 1,161.

SUBIDA DE TARIFAS. Ante esta situación, dede ACTM apuestan por el aumento de tarifas, "aunque es muy difícil trasladar el 100% del encarecimiento", detalla López. La primera de ellas ya se produjo en febrero y fue "de entre un 7 y un 9%". "Ahora, esperaremos a la llegada de junio para estudiar de nuevo cómo han aumentado nuestros costes para negociar otra", añade.

El secretario general de ACTM reconoce que este no es un buen momento para llevar a cabo estos aumentos debido a que ssu clientes, la construcción y el azulejo, tampoco atraviesan por su mejor situación. Sin embargo, destaca que "seguir con esta situación sin aumentar precios podría suponer el cierre de algunas empresas de Castellón".

Por este motivo, destaca que ahora "preferimos negociar de forma individual con nuestros clientes el aumento de tarifas".

PREOCUPACIÓN SINDICAL. Los sindicatos también se muestran preocupados por este escenario ya que la patronal asegura no poder garantizar aumentos de los salarios más allá del Índice de Precios al Consumo por el aumento de los costes. El representante del sector de UGT, Javier Gregori, afirma que "el incremento del precio del combustible no está justificado y ha generado que las empresas se cierren en banda a la hora de negociar el convenio colectivo".