El abogado de Kamel Salhi, el ciudadano argelino vecino de Vila-real sobre el que pesa una orden internacional de busca, captura e ingreso en prisión por su presunta vinculación con una célula jihadista y que manifestó que iba a entregarse en la embajada española en Argelia, donde se encuentra, aseguró ayer a Mediterráneo que la policía secreta de su país le detuvo en la noche del miércoles en su vivienda. El letrado de Salhi explicó que ha remitido un escrito al magistrado Baltasar Garzón, del Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional de Madrid explicando lo sucedido, dado que ni él ni su familia tienen "ningún conocimiento de dónde se encuentra actualmente, ni cómo está".

"El lunes me puse en contacto telefónico con la embajada de España en Argel. Concretamente, con la Agregaduría de Defensa. Allí me pasaron con el enlace de la Guardia Civil, el cual, haciéndose cargo de la gravedad de la situación, tomó nota de todos mis datos de contacto, asegurándome que ese mismo día, por la tarde, me llamarían para indicarme el procedimiento a seguir. Me adelantó que la gestión en cuestión tendría que posponerse hasta el martes, toda vez que ese día era festivo en la embajada, por celebrarse la onomástica de don Juan Carlos de Borbón", explica el letrado en la documentación remitida a la Audiencia.

Así, según el escrito, "la llamada telefónica no llegó a producirse, motivo por el cual volví a contactar con dicha Embajada el martes y dijeron que ya se estaban realizando las gestiones oportunas, y que me avisarían en breve. Ni el martes ni el miércoles recibí llamada alguna". El abogado manifestó que ese día por la noche intentó ponerse en contacto con su cliente y al no lograrlo, habló con su familia, que le informó de la detención.

Esta se produce 15 días después de la macrooperación policial dirigida por la Audiencia Nacional que culminó con cinco detenidos en la provincia de Castellón que presuntamente formaban parte de una célula jihadista, y con la orden de busca, captura e ingreso en prisión de Salhi, junto a otros.

"ES UNA NEGLIGENCIA" El letrado "ruega a Garzón que se haga cargo de la gravedad de la situación. Estamos, como mínimo, ante una negligencia gravísima de los funcionarios competentes de la embajada en Argel". Y le insta, a través del escrito, a que "tome cartas en el asunto, intentando por todos los medios averiguar su paradero actual, e instando a las autoridades competentes a que lo pongan a disposición del juzgado".