La Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento de Castellón reclamaron ayer al Gobierno central la inclusión en los presupuestos generales del año 2009 de una partida económica para la redacción del proyecto de obras del acceso ferroviario sur. Los máximos dirigentes de ambas instituciones se reunieron para analizar la próxima reapertura del ramal ferroviario norte al puerto, que supondrá el paso de trenes de mercancías a diario por un sector del Grao donde residen más de 4.000 personas.
El presidente del Puerto, Juan José Monzonís, anunció que en un máximo de dos semanas remitirá al Ministerio de Fomento un informe que estima entre 40 y 50 millones de euros el coste de las obras por el sur "mientras el próximo mes habrá una reunión para hablar de plazos". Su deseo es que, en el mejor escenario posible, las obras empiecen en el año 2010. Hasta entonces, según añadió, se intentará "compatibilizar el bienestar de los ciudadanos con el deseo económico de servir a la sociedad" mediante el trazado norte "porque los empresarios cerámicos deben ser competitivos". La fórmula para minimizar el impacto de la vía en el Grao, "deberemos buscarla con el Ayuntamiento", insistió. Monzonís dijo ignorar cuántos trenes recorrerán diariamente el Grao aunque sí apuntó que lo harán a 20 kilómetros por hora donde no haya pasos a nivel, y a sólo 4 kilómetros en los cruces.
Por su parte, el alcalde, Alberto Fabra, justificó la vía férrea del norte para dotar al puerto de "más competitividad", pero reiteró su petición del acceso sur, que es "donde se concentran las industrias más potentes". "El Ministerio tiene que mojarse y acelerar los trabajos", insistió.
