El puerto de Castellón dejará de tener una de las cuatro terminales de carga y descarga de que dispone actualmente antes de que acabe el año. Así lo han confirmado a Mediterráneo fuentes de la empresa. En concreto, es Castellón Terminal Portuaria la agrupación que se encuentra en proceso de liquidación amistosa.

Después de cinco años de funcionamiento tras su creación por parte de tres firmas consignatarias (Viuda de Enrique Gimeno, TMC y Marmedsa), la compañía estibadora dejará de trabajar en los tres meses que faltan para finalizar el año. Este hecho se produce debido a las continuas pérdidas de la entidad, producidas por "la falta de tonelaje y de comerciales", es decir, a un volumen de trabajo insuficiente, tal y como señalaron fuentes de la misma terminal.

La compañía, que aún estiba y desestiba carga general en los muelles del centenario y del chaflán, da trabajo directamente a una veintena de personas, además de los trabajadores portuarios y transportistas utilizados para mover la carga. En principio, cada una de las empresas que forman la terminal ha de reubicar a sus empleados, según confirmó una de estas firmas.

La disolución no debería de afectar al tráfico portuario de los muelles castellonenses, aunque las compañías consignatarias todavía están estudiando la forma en que darán servicio a sus clientes. Por esta razón, la Autoridad Portuaria no quiso valorar el hecho. Desde la firma que aportaba el principal volúmen de trabajo a la terminal, Marmedsa, se reconoció a este diario que barajan la posibilidad de "reactivar" una empresa satélite, Tecasa, como estibadora y volver a operar así en los muelles castellonenses.