La consolidación en la internacionalización de los matrimonios en España y su carácter integrador y hospitalario es una realidad en España". Son palabras de Eduardo Hertfelder, presidente del Instituto de Política Familiar (IPF), tras presentar un nuevo informe del que se desprende que los enlaces con cónyuges extranjeros representan ya el 17% del total de los matrimonios.

Esta realidad llega más allá en la provincia de Castellón, donde este tipo de bodas suponen cerca del 20% del conjunto. Además, su número casi se ha cuadruplicado entre los años 2000 y 2007, último ejercicio del que el Instituto Nacional de Estadística (Ine) dispone de datos, al pasar de apenas 146 a la cifra de 529.

En cuanto al total de los matrimonios registrados en el ámbito provincial, la tendencia a la baja se ha roto por primera vez desde el 2003, último periodo en el que se incrementó el número, al alcanzar los 2.724.

MUNICIPIOS SIN BODAS Por otra parte, el último informe del Ine revela que 46 pueblos castellonenses no han registrado ningún enlace en todo un año. Entre ellos, se cuentan no solo enclaves de tamaño muy reducido, como Herbés o Palanques, sino también otros como Sant Jordi o Cortes de Arenoso.

Con toda lógica, a tenor del volumen de población, la mayor parte de los enlaces se han celebrado en la capital, que lidera el ránking, con 876; seguida de Vila-real, con 245; Burriana, con 191; la Vall d´Uixó, con 160; Almassora, con 142; Onda y Vinaròs, ambas con 113, y Benicarló, con un total de 102.

A la hora de medir la evolución del número de enlaces en 2008 y en lo que va de año, a la espera de la publicación de los datos globales oficiales, la tendencia varía de forma significativa en función de la población.

En todo caso, la situación de crisis económica generalizada podría hacer pensar que las uniones matrimoniales han registrado un descenso significativo, como consecuencia del recorte de los ingresos que muchos castellonenses padecen.

BODAS CIVILES En el apartado de las bodas civiles, desde el Ayuntamiento de Vinaròs explican, por ejemplo, que "más o menos estamos igual que otros años; los matrimonios no han bajado y, es más, la gente ya no se espera a la primavera, sino que se casa durante todo el año, incluido el invierno".

En Almassora, las cifras no solo se mantienen, sino que aumentan, ya que, tal y como informan desde el consistorio, en los cuatro primeros meses de este año se han celebrado 19 bodas (6 canónicas y 13 civiles), mientras que en el mismo periodo de 2008, la cifra total fue de 18 (5 canónicas y 13 civiles).

Sin embargo, en otros municipios, la tendencia es la contraria. En el Ayuntamiento de la capital, hasta el pasado día 3 de este mes, se han celebrado 25 uniones matrimoniales, frente a las 33 celebradas en el mismo periodo de 2008, un año en el que se registraron 184 bodas.

En una línea similar se sitúa Vila-real, en lo que a uniones civiles se refiere, ya que el consistorio solo ha contabilizado en lo que va de 2009 un total de 10 enlaces, frente a los 70 formalizados durante todo el año pasado.

Por otra parte, desde el Juzgado de Paz de Benicarló ponen de manifiesto que "las bodas han bajado mucho porque, si en 2008 se inscribieron 84, a fecha de hoy solo hay 13, la mitad que en el mismo periodo del ejercicio precedente, teniendo en cuenta que en enero del año pasado ya se había llegado a ese número de expedientes".