El conseller de Sanidad, Manuel Cervera, anunció ayer que tiene la "intención" de reunirse con el arzobispo y los obispos de la Comunitat Valenciana para que se establezca un criterio común para todos, en relación con el beso de las imágenes de los santos durante las fiestas patronales ante la pandemia de gripe A. Hace algunos días, el vicario general de la diócesis de Segorbe Castellón, Miguel Simón, informó de que están solicitando información a Sanidad, y que están aún a la espera de "recibir instrucciones" al respecto. Sin embargo, aunque Sanidad todavía no había emitido ningún protocolo de actuación hasta el momento, algunos sacerdotes de la provincia de Castellón han dado ya recomendaciones a los fieles ante los festejos religiosos que incluyen tradicionalmente besamanos o besapiés.

Es el caso del párroco de l´Alcora, Javier Aparici, quien recordó a los fieles que "pueden venerar la imagen del Santísimo Cristo sustituyendo, si lo creen conveniente, el tradicional beso a los pies con una inclinación de cabeza o tocando la imagen".

Asimismo, las autoridades eclesiásticas de Morella acordaron suprimir el tradicional acto de tocar a la Mare de Déu de la Vallivana, por lo que los fieles no pudieron pasar las manos por la imagen ni besarla. Una decisión que adoptaron las autoridades eclesiásticas morellanas sin que fuera solicitada por el obispado de Tortosa ni por la Conselleria de Sanidad. Por contra, el párroco vila-realense, mosén Guillermo Sanchís, advirtió de que acataría "la decisión que adopten las administraciones".

EL CONSELLER Preguntado al respecto, el conseller de Sanidad apuntó: "Prefiero hablar con los máximos representantes de la Iglesia para que unifiquemos un criterio razonable y que la gente lo entienda como tal, y que lo pongamos en práctica". No obstante, matizó que "todas las medidas que pongamos en práctica para conseguir una higiene de sentido común son buenas, en este tipo de gripe y en cualquier otra". Así, defendió que se "extremarán al máximo las medidas para que todos las conozcan".

Con todo, Cervera, quien manifestó que la Administración está trabajando "con mucha tensión", quiso dar un mensaje de "serenidad" a los ciudadanos. En este sentido, recordó que se han dado en la Comunitat 42 casos de gripe por cada 100.000 habitantes, lo que supone que, aproximadamente, 2.000 ciudadanos habrán pasado por esa afección, mientras que la incidencia hospitalaria es "escasísima".

Asimismo, el próximo lunes se reunirá con la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, y con sus homólogos del resto de comunidades autónomas. Respecto a la vacunación, abogó por "avanzar en determinar ya los grupos de riesgo para la vacuna" y por "mandar un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos diciendo que se vacunará a todo aquel que le haga falta vacunarse". "Yo recomiendo que se deje a los expertos --no a los políticos sino a los técnicos, que sean ellos los que, en coordinación y en conocimiento con otras políticas que se están haciendo en el resto de Europa, marquen esa pauta", señaló.