Castellón vivió ayer un día “histórico” con la constitución del Consejo Social de la Ciudad, según destacaron los presentes. Un acto solemne celebrado en el salón de plenos del Ayuntamiento de Castellón, en el que coincidieron cuatro alcaldes de la capital (Antonio Tirado, Daniel Gozalbo, José Luis Gimeno y Alberto Fabra), sirvió para crear este órgano consultivo que asesorará al Ayuntamiento.

Formado por vecinos, grupos políticos, sindicatos, empresarios, representantes de la Universidad y destacados miembros de la cultura y otros ámbitos de la sociedad castellonense (hasta totalizar 46 personas), este órgano, presidido por el primer edil de la ciudad, echó ayer a andar convirtiendo a Castellón en una ciudad “pionera” en toda España en lo que a participación ciudadana se refiere, según destacó Alberto Fabra. El munícipe castellonense también remarcó la capacidad de “aglutinar las voluntades de todas las personas, hombres y mujeres, que en esta ciudad vivimos”.

Como el actual alcalde, un predecesor en el cargo, Daniel Gozalbo, destacó también el paso dado y remarcó la “voluntad integradora” con la que nace este órgano. El principal opositor de Fabra, el portavoz socialista en el Ayuntamiento Juan María Calles, también se “congratuló” de la constitución de un ente que calificó de “importantísimo” y que contribuye a que Castellón sea “más capital gracias a un órgano tremendamente participativo”.

El próximo paso para comenzar a trabajar es dividir el ente en las comisiones que analizarán los temas. El vicepresidente Juan José Pérez Macián anunció que esto se puede producir en julio y que después se aprobará el reglamento interno. El Consejo funcionará con comisiones y se reunirá en pleno dos veces al año, dijo. H