La Comunitat acoge este verano a 120 niños ucranianos, con escasos recursos o huérfanos afectados por la catástrofe de Chernóbil, y a un grupo de 461 saharauis, dentro del programa de acogida temporal Vacaciones en Paz. Los pequeños residen con las más de 500 familias que se han unido a esta iniciativa.

El director general de Inmigración y Cooperación al Desarrollo, Josep Maria Felip, ha destacado “la importancia de llevar alegría a los más pequeños que todavía en muchas zonas del mundo sufren la vulneración de sus derechos elementales”. Felip expresó su reconocimiento a la labor de las familias que cada verano acogen a estos niños “actitud que pone de manifiesto la vocación de acogida y el carácter profundamente solidario de los valencianos”. H