El delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta, admitió ayer que la llegada de la alta velocidad a Castellón podría “retrasarse si ninguna empresa se interesase por invertir en los tramos pendientes y si la situación económica fuese tan complicada que, en ese caso, el Gobierno de España no pudiese asumir los gastos”. Sin embargo, apuntó que no cree que se llegue a “esa tesitura” y destacó que el “99% del trayecto (Madrid-Valencia) lo ha hecho el Gobierno de España con el dinero de los ciudadanos”, por lo que “los dos tramos que faltan” se “van a hacer sin lugar a dudas”. “Queremos hacerlo con la iniciativa privada, pero si no es así, el Gobierno de España lo hará”, apuntó.

Asimismo, aseveró que no cree que la participación privada suponga un alza en las tarifas para usuarios de AVE entre Castellón y Madrid, sin atreverse a concretar si habrá subida, y posiblemente, dijo, una “parte del precio del trayecto se destinará a las empresas” que participen en la inversión. También reclamó “coherencia” a las instituciones públicas y económicas castellonenses, y les instó a abandonar las críticas y a colaborar. Sobre si alguna empresa se ha interesado en la financiación, dijo que “reiteradamente” la sociedad civil y la Confederación de Organizaciones Empresariales de la Comunitat han manifestado la voluntad de “colaborar” e “incluso de ejecutar tipos de infraestructuras” como el AVE. Y añadió que en realidad el Gobierno solo pide “un esfuerzo pequeño” en dos tramos, algo que Castellón “está en disposición” de ofrecer. Señaló que este AVE será “rentable” y que “no hay ninguna voluntad de marginar a nadie, y desde luego, a Castellón, ninguna”. “Castellón va a disfrutar de los beneficios de la alta velocidad desde este diciembre”, dijo.