La portavoz adjunta del Bloc en el Ayuntamiento de Castellón, Ali Brancal, dijo ayer que “pese a las continuas reivindicaciones en Valencia de la apertura del centro de dependientes Gran Vía del alcalde, Alberto Fabra, y su equipo, esta infraestructura, que ha costado 10 millones de euros a los castellonenses, permanece cerrada, sin fecha de apertura”. La nacionalista especificó que “las declaraciones del alcalde, en la línea de seguir insistiendo ante la Conselleria todas las veces que haga falta para conseguir que se ponga en marcha el centro, no tranquilizan a los afectados”.

Dice que “si el alcalde de Castellón tuviera algún peso político para influir en la Generalitat, con una vez que lo pidiera sería diferente”. Brancal incidió en que “el PP local lleva ya dos años pidiendo la apertura del centro y que su propio partido a nivel autonómico no le haya hecho caso. Es la muestra más evidente de que el partido seguirá ignorando las necesidades de Castellón y sus ciudadanos”.

La portavoz añadió que se necesitan “unos representantes en Les Corts capaces de conseguir las mejoras que se necesitan en Castellón y Grao, con peticiones continuas que Compromís sí hace”. H