El distrito marítimo del Grao ha entrado ya de lleno en su semana taurina dentro del programa de actos de las fiestas de Sant Pere, en lo que supone el atractivo fundamental de los festejos.

Y lo hizo con dos primeros revolcones que sufrieron dos jóvenes de 25 años en la embolada de los toros en la noche del pasado sábado y que se quedaron solo en susto mayúsculo. Uno sufrió una rotura de tabique nasal y el otro quemaduras leves en una pierna por las bolas de fuego del toro embolado, en dos sucesivas cogidas que fueron realmente espectaculares, pero que no tuvieron una mayor trascendencia.

DOS TOROS CERRILES // Unos festejos taurinos que continuaron ayer con la exhibición de dos toros cerriles pertenecientes a las ganaderías de Isaías y Tulio Vázquez y Hermanos Domínguez Camacho, patrocinados por las peñas La Fugida, L’Arrastre y La Foradà, tras el divertido desfile y entrada de las peñas. Unos astados que a medianoche, como manda la costumbre, fueron embolados en el recinto taurino.

En la jornada de ayer también los niños fueron protagonistas con una serie de actos dedicados a los más pequeños como fueron talleres de manualidades, discomóvil y animación infantil, en unas atracciones que tuvieron como escenario los jardines del Puerto y que contaron con una numerosa participación. El segundo día de las fiestas de Sant Pere se cerró con la primera sesión del ciclo de teatro en el centro cultural La Marina. H