La portavoz del grupo municipal socialista en Castellón, Amparo Marco, reclamó ayer al equipo de gobierno una rebaja de los 12 asesores adscritos a alcaldía para reducir el coste medio para el erario público de cada concejal del PP. Marco calculó que, si se suman los 5.000 euros anuales de subvención al grupo popular, los 1.969 euros de ayuda por cada edil, el sueldo bruto de los 15 ediles, los salarios de los cuatro asesores del PP y los otros 12 de alcaldía, el coste bruto mensual por cada concejal popular es de 6.850 euros. La misma ecuación arroja un gasto de 2.102 euros por cada edil socialista, de 3.668 euros por concejal del Bloc y de 5.250 euros por la representante de EU, según los datos del PSPV-PSOE. “Si todos los grupos tuviéramos el mismo coste por concejal el ahorro en todo el mandato sería de 3.719.918 euros, que podríamos destinar al Pacto Local por el Empleo”, defendió Marco.

En ese sentido va la enmienda a la totalidad que ayer presentó Marco a la moción del Bloc que será debatida en el pleno de mañana, y que planteaba recortar un 10% los sueldos de los ediles que cobren más de 30.000 euros y un 15% para quienes ingresen más de 40.000 euros anuales.

La portavoz socialista instó a Alberto Fabra a rebajar la cifra de asesores de alcaldía y le pidió “seriedad” porque, en sus dos primeras semanas de mandato, “ya ha rectificado dos veces, la primera con el nombramiento de Carlos Fabra como concejal no electo y ahora con la marcha atrás en la subida de sueldos”.

Respecto al IBI y a la revisión catastral, prometió vigilar que el próximo recibo se congele. H