La junta directiva de Sentimiento Albinegro, asociación de accionistas minoritarios y/o abonados del CD Castellón SAD, celebró su asamblea general, la cuarta en 10 meses de existencia, en la que quedó patente su independencia, reflejada, entre otras cosas, en la negativa a entrar tanto en la Fundación como un nuevo patrono, como en el futuro consejo de administración que saldrá de la junta general de accionistas. A este respecto, Sentimiento instará a partir del 2 de enero, si antes no lo hace Fernando Miralles, a la convocatoria de una junta general extraordinaria, ya que la legislación así se lo permite.
La asamblea, que se prolongó casi cuatro horas, también sirvió para renovar la junta, que había quedado mermada tras la renuncia meses atrás de Isidoro Gasque, Pedro Luis Izquierdo y Juan Triviño. Sus cargos serán ocupados por Emilio Álvaro, Enrique Galindo y Juan Carlos Bellés.
Una asamblea tensa en algunos momentos, en los que una parte de los asociados cuestionó la ley del silencio de la que durante los últimos tiempos ha hecho gala la junta. Un silencio que no reflejó la inmovilidad, sino todo lo contrario, puesto que su presidente, Conrado Marín, detalló todos y cada uno de los movimientos realizados desde el 27 de julio, fecha de la última asamblea.
La junta también entonó el mea culpa y a partir de ahora mostrará una mayor transparencia en sus movimientos. De hecho, la asociación, ante la posible renuncia de Conrado Marín, optó porque este siga al frente.
La asamblea también sirvió para plasmar las actuaciones en contra de Castellnou2005, en proceso, como la ya consumada sobre José Manuel García Osuna ante la RFEF. Sentimiento Albinegro criticó duramente la pasividad de los poderes públicos de Castellón y también reclamó una mayor transparencia por parte de Fernando Miralles.
polémica // La Fundación fue uno de los puntos más calientes y debatidos a lo largo de toda la noche. La situación del órgano que gestiona el fútbol base está envuelta a su juicio en la misma nebulosa que el club. Hubo un informe sobre estatutos, actas y demás documentos, que sin embargo no sirvió para aclarar quienes son sus patronos actuales, el tiempo que están ligados y la relación del CD Castellón SAD con la Fundación. Además, se dio a conocer que si la deuda del club es elevada, también lo es la que Castellnou ha dejado en su paso por la Fundación, cifrada en 600.000 euros, lo que pone en serio peligro su futuro.
