El conseller de Educación, Formación y Empleo, José Císcar, prometió ayer que “ningún proveedor se quedará sin cobrar” pese a las dificultades económicas que atraviesa la Generalitat. “Quiero transmitir tranquilidad porque afrontaremos los pagos, soy muy consciente del daño que estamos haciendo pero hay circunstancias que no podemos controlar”, alegó.

Císcar admitió que la situación es “muy complicada, límite, porque la semana pasada la Generalitat hizo frente al pago de 1.500 millones de euros de deuda vencida”, precisó para justificar este “problema coyuntural de tesorería”. Císcar prometió que antes del día 31 abonará a los colegios concertados 50 millones para las nóminas y pagas extra del profesorado.