Los participantes en la decimoctava sesión del III Congreso Castellón 2020 abogaron ayer por la democracia y por la buena representación política (transparente, preparada y adecuada a sus obligaciones) como forma de respuesta a las demandas de la sociedad civil. En el debate, moderado por la profesora de Ética Elsa González, se abordó la necesidad de aportar iniciativas que mejoren el ambiente de crispación, como que los medios de comunicación no actúen como meras empresas y sean conscientes de los efectos que tienen en la sociedad, o la necesidad de avanzar en la democracia mejorando los cauces de participación ciudadana y también la conexión entre la sociedad y los poderes públicos.

Así, Pilar de la Guardia, miembro del movimiento 15-M, expuso que la ausencia de respuestas es la que enciende la mecha de la indignación y consideró indispensable un sentimiento de corresponsabilidad como miembros de la sociedad civil.

Por su parte, María Sánchez de Mora, quien explicó el trabajo de la Fundación Borja Sánchez para niños con parálisis cerebral, ofreció el contrapunto positivo: el enorme potencial de las personas para cambiar las cosas cuando se ponen juntas a trabajar por una causa común. Así, la responsable de Comunicación y Relaciones Públicas de la Fundación expuso una herramienta para financiarse en época de crisis a través del teaming, que consiste en pedir cantidades económicas pequeñas a un gran número de personas en vez de pedir grandes cantidades de dinero a una sola, lo que demuestra el poder del equipo.

Por su parte, Vicent Zaragoza, experto en inmigración, abogó por que hay que avanzar en la integración de las personas inmigrantes en la sociedad y por que estas deben ser titulares de derechos y obligaciones al igual que el resto de ciudadanos.

AUTOCRÍTICA // Por último, Juan Carlos Insa, secretario general de la Unión de Consumidores UCE en Castellón, describió tres claves para que funcione correctamente la sociedad: independencia y autonomía financiera, capacidad crítica y autocrítica. Defendió que los medios de comunicación deben ser una vía entre las necesidades sociales y la política y que los órganos consultivos han de servir de enlace entre la sociedad y los poderes públicos, transmitiendo a estos las necesidades reales de la ciudadanía y no limitarse a actuar al dictado de estos o careciendo de capacidad crítica. También abundó a que en época de crisis se mantengan las ayudas a las asociaciones porque si se recorta se desmantela parte importante de la sociedad, aun a pesar de que es importante que estas cuenten con recursos propios. H