Solo un Partido Socialista fuerte, unido y renovado puede cambiar el rumbo de las cosas, ofrecer la energía necesaria para reiniciar la Comunitat Valenciana e impulsar políticas de crecimiento que generen empleo y no solo una espiral interminable de recortes que minan la cohesión de nuestra sociedad y la alejan de la recuperación”. Ximo Puig, candidato a la secretaria general del PSPV-PSOE, presentó ayer sus propuestas para Reiniciar la Comunitat Valenciana --título de la conferencia que impartió en la Casa de Valencia en Madrid-- ante un centenar de personas. Entre ellas figuraban el secretario de política institucional y autonómica del PSOE, Antonio Hernando; la secretaria de política económica y empleo del PSOE, Inmaculada Rodríguez-Piñero; el exministro de Industria, Miguel Sebastián; el vicepresidente de Bankia, Francisco Pons; o el dirigente de UGT, Toni Ferrer. También ocuparon un lugar destacado Leire Pajín, Ciprià Císcar y José Luis Ábalos, líderes de tres familias distintas aliadas con Puig en su carrera para liderar el PSPV que, con su presencia, desactivaron el mensaje de los afines a Jorge Alarte sobre una reciente supuesta ruptura de la entente a tres bandas. La asistencia de Hernando, uno de los máximos colaboradores de Alfredo Pérez Rubalcaba, también evidencia que su candidatura tiene todas las bendiciones de Ferraz.

UNA NUEVA RELACIÓN // Puig pretendía también con su acto en Madrid dejar constancia de su voluntad de “establecer una nueva relación entre el PSPV y el PSOE” en la que la federación valenciana deje de ser residual en el conjunto del socialismo español, como sucede ahora. “Mi aspiración no es sólo ganar un Congreso en mi partido sino hacer una amplia convocatoria a todos los que están dispuestos a contribuir a que la Comunitat Valenciana inicie un tiempo nuevo… y aquí, muchos de vosotros sois actores principales en este cometido”, dijo, dirigiéndose a los presentes.

El diputado castellonense realizó en su intervención un análisis de las consecuencias de la crisis recordando cómo “la derecha alentó en toda España, pero especialmente en tierras valencianas, una carrera incontrolada de promoción del sector inmobiliario” y cómo “los recursos podrían haber ido a la innovación, la modernización y la internacionalización”. H