Por si el Castellón ya no tuviese que combatir a un montón de obstáculos de consideración, anoche tuvo que hacer frente a las consecuencias de la persistente lluvia que anegó Castalia y, sobre todo, a la actuación de Fernández Vidal, otro de los árbitros que, esta temporada, se ha sentido la estrella del partido, pero para mal. Perjudicó notablemnte a los albinegros, pero el súmum llegó en el minuto 31, cuando convirtió la clara roja de Toni García (Juste iba directo hacia el portero Emilio, en el semicírculo del área y tras haber driblado al central nuciero) en amarilla.

Pedro Fernández Cuesta no quería hablar de este colegiado, se mordió la lengua... pero resumió a la perfección lo vivido. “Lo de este árbitro ha sido de juzgado de guardia, ni él ni el linier han estado muy afortunados”, dijo, en alusión, esto último, al auxiliar de tribuna, que masacró al Castellón a base de fueras de juego.

Algo más prolífico en su alocuión estuvo Marc Trilles. “La verdad es que estamos hartos, es para que se lo hagan mirar, que no tiran el partido a fer la mà”, manifestó, de forma elocuente. “Nos ha echado por tierra el partido. Teníamos mucha ilusión por seguir yendo para arriba, pero él nos ha matado. Seguro que él (Fernández Vidal) no tendrá remordimientos y es triste, pero así es el fútbol y lo estamos sufriendo nosotros”, argumentó.

“UN 10 A LOS JUGADORES” // Retomando el análisis del encuentro, el madrileño admitió estar “profundamente emocionado” por la entrega y fidelidad de su plantilla: “Un 10 para todos los jugadores, porque no se puede pelear más de lo que lo están haciendo, con más o menos acierto, pero están demostrando una actitud fantástica”, esgrimió Cuesta.

Sin embargo, también torció un poco el morro a la hora de evaluar a Hugo García, que vio la roja y, así, deja al Castellón sin delanteros para este domingo: “No ha estado muy afortunado, pero debe servirle para hacer un punto y aparte, porque en el banquillo hay que estar callado”.