La Conselleria de Medio Ambiente notificó ayer ocho sanciones por incumplimiento de la ley de caza 13/2004, de 27 de diciembre, de la Comunitat Valenciana, a ocho cazadores de la provincia.

Una de ellas se suma a la larga lista de multas que arrastran los paranyers y que, en este caso, es por infringir el artículo 58-2-18 de la citada ley, que hace referencia a las prohibiciones establecidas en el método de caza, es decir, se emplearon trampas para coger a los animales que no están autorizadas. El multado, que responde a las siglas de A.S.S., vecino de Vila-real, deberá pagar 301 euros.

Además, el mismo departamento autonómico sancionó a otros cuatro cazadores --de Burriana (Y.K.S.), Vila-real (M.M.F.C.), la Vall d’Uixó (L.M.S.G.) y Onda (S.P.G.)-- a pagar, 301 euros en los dos primeros casos y 601 en los otros dos, por infringir los artículos 58-2-18 y 58-2-20, por utilizar métodos de caza no autorizados y cazar por la noche sin tener el correspondiente permiso, considerándose la caza nocturna la practicada entre el crepúsculo vespertino y el matutino.

La Conselleria de Medio Ambiente también notificó una sanción a un vecino de Peñíscola, P. F.G., por quebrantar el artículo 34.1 que, literalmente, “sanciona al titular cinegético o adjudicatario de un espacio cinegético por no cumplir el deber de caza ordenada, es decir, por no cumplir con la obligación de llevar a cabo el plan de gestión establecido en el coto de caza”. Por ello deberá pagar una multa de 301 euros. Y otra a un vecino de Benicarló, F.M.A., por “emplear lazos, anzuelos y trampas no permitidas”.

CAUTIVIDAD // Por último, M.G.D., de Benicarló, ha sido sancionado por “tener piezas de caza mayor en cautividad fuera de cotos cercados, granjas o centros”, aunque no se especifica la cantidad. H