El presidente provincial del PP de Castellón, Carlos Fabra, manifestó ayer que si el presidente del PPCV y de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, le hubiera pedido que dimitiera, lo habría hecho. Pero “no me lo ha pedido, ni él ni el presidente nacional del partido, y por alguna razón será”, aseveró. Así se pronunció en la presentación de la campaña de promoción de los servicios de la Cámara de Comercio, de la que es secretario general, tras ser inquirido por la decisión de destituir a altos cargos del Consell por su imputación. Fabra señaló que sobre este punto el president sabe su opinión y él la suya, y la respeta. “Me parece que el presidente puede hacer lo que crea conveniente. Cuando yo presidía la Diputación no me gustaba que nadie viniera a decirme lo que tenía que hacer”, dijo. Y para zanjar la polémica, resaltó: “Yo a mi presidente lo apoyo a muerte”.

Asimismo, Fabra desveló que le ofreció al jefe del Consell su dimisión como miembro electo nato del Comité Ejecutivo --por ser presidente provincial del Partido Popular y estar imputado--, aunque este le dijo que “ni hablar del peluquín”. “Estoy contento como estoy, muy tranquilo y muy seguro, y él también está muy tranquilo y muy seguro”, agregó.

“COMO UNA ROSA” // Con ello insistió que él no se aferra al cargo, de hecho, ha elegido quedarse “en la reserva”. Eso sí, dijo estar “como una rosa, en plena forma”. Y dijo que, de concurrir, “habría obtenido 18 diputados contra 8 del PSOE. Cada vez que me he presentado he sacado más votos a pesar de llevar imputado casi nueve años en este proceso judicial mediático-político urdido por gente relacionada con un partido de la oposición”. De la defensa que le hizo Alberto Fabra como presidente de Aerocas, Fabra reseñó que sale “baratísimo”, pues en 12 años no ha cobrado “ni una peseta ni un café”, y da “muchas horas”. Tras el congreso del PP se reunirán antes que con Concesiones y “habrá que ceder algo”. H