En una situación en que “todas están en la cuerda floja”, según el delegado provincial de la Unió, Vicent Goterris, la fusión de las más de 20 cooperativas citrícolas provinciales “en una sola provincial para la comercialización”, como destaca su presidente, Vicent Canós, es una vía de solución.
Esta es una posibilidad que se baraja desde hace años y que comparten las organizaciones agrarias. El secretario técnico de Fepac-Asaja, Doménec Nàcher, afirma que “habría que fusionar cooperativas a nivel local”, y Goterris recuerda que entre todas “tienen el 50% de la producción provincial y podrían controlar más el mercado”. Desde las propias firmas, el gerente de Agroal, Rafa Capella, también es favorable y señala que “estamos luchando David contra Goliath”, en referencia al poder que tienen las cinco o seis principales empresas distribuidoras de fruta, que además controlan el mercado europeo.
Su homólogo de Sonex 5, Javier Mechó, señala que el sector “necesita reestructuración” y asegura que estas empresas “no se gestionan como tal”. También el presidente de AVA-Asaja, Cristóbal Aguado, culpa a las liquidaciones “ridículas” de la “mala gestión”. H
