Las negociaciones llevadas en los últimos días de forma discreta entre los presidentes de las tres federaciones de vecinos de Castellón y la concejala de Participación Ciudadana, Marisa Ribes, cristalizaron ayer y permitirán a los representantes ciudadanos intervenir en los plenos municipales.

Así lo anunció la responsable municipal del área apenas 48 horas antes de que el ejecutivo local sometiera a aprobación el nuevo reglamento orgánico, que iba a ser mucho más restrictivo ya que solo permitía a los vecinos intervenir en las comisiones de pleno, que se celebran a puerta cerrada.

Tanto las federaciones vecinales como el grupo municipal de Esquerra Unida reclamaron sin éxito en las alegaciones que presentaron al borrador del documento que los plenos no fueran un monólogo político, como ahora sucede. De hecho, en la reunión del consejo municipal de Participación Ciudadana, Ribes rechazó esas alegaciones.

Las conversaciones posteriores con Amalio Palacios (Federación de Asociaciones Ciudadanas, Consumidores y Usuarios), Francisco Cabañero (Coasveca) y Vicky Amores (Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos) recondujeron la postura inicial, como confirmó Ribes tras la reunión definitiva, a la que también asistió el portavoz del PP, Miguel Ángel Mulet. “Hemos ido reforzando nuestro compromiso con el desarrollo de los mecanismos que aseguran una mayor participación ciudadana”, afirmó Ribes.

Quienes deseen hablar en el pleno deberán pertenecer a alguna de las asociaciones registradas en el consistorio. “Las intervenciones deberán presentarse y justificar su posterior debate ante la presidencia del pleno con antelación y por escrito motivado y razonado, al menos con 24 horas de antelación. También deberán ser expuestas y contar con la aprobación de la comisión del pleno y la junta de portavoces”. H