Un total de 800 familias recibe cada mes ayuda de la Fundación Caja Castellón-Bancaja en la provincia. En concreto, según explicó el gerente de la Fundación, Julián Minguillón, reparten mensualmente 800 vales por un importe de 33 euros cada uno para adquirir un lote de productos alimentarios y de primera necesidad. Una ayuda que seguirán prestando a lo largo de este año y principios del 2013, a la espera de que se clarifique el futuro de la obra social de Caja Castellón.

La Asociación Familiar Castellonense distribuye estos vales de comida entre las familias necesitadas. Este colectivo regenta también la guardería Enrique Odriozola, que atiende a 80 niños en riesgo de exclusión y cuyo sostenimiento supone a Bancaja 127.000 euros anuales.

Asimismo, la Fundación Caja Castellón-Bancaja tiene cedido un inmueble ubicado en la Gran Vía Tárrega Monteblanco de Castellón a dos entidades benéficas. Así, en parte del inmueble se ubica la guardería San Vicente Ferrer, que gestiona Cáritas y que atiende a otros 60 niños, y supone un coste de 200.000 euros.

CASA CUNA // En la otra parte del edificio se ubica un hogar de acogida a madres gestantes o con hijos menores a su cargo en riesgo de exclusión que gestionan las siervas de la pasión, la misma comunidad que también gestiona en Valencia la Casa Cuna Santa Isabel. Actualmente, en ella residen siete madres y 11 niños, con un coste de 200.000 euros.

Se suma el reparto de mantas, pañales y libros de texto, junto a regalos en Navidad a través de la asociación. Hay que añadir las diez becas para la reinserción de presos drogodependientes, que gestiona la Fundación Amigó y que representa 37.500 euros anuales. El convenio está suscrito con una vigencia de dos años. H