Un nuevo plan municipal de control tributario, cuya vigencia se alargará hasta el año 2015, reforzará las inspecciones para poner coto al fraude en el pago de impuestos y tasas.
El Ayuntamiento de Castellón ha aprobado la medida --incluida en el plan de ajuste 2012-2022- con el objetivo de elevar la recaudación por la vía de quienes defraudan en el pago de tributos y no mediante el instrumento de la sanción. Prueba de ello es que aquellos particulares o empresas que sean detectados por los inspectores municipales no serán multados, sino que se les dará 30 días para regularizar el pago de sus impuestos. "El objetivo es intensificar más el control para que la recaudación de los impuestos sea solidaria y no represora, que todo el mundo pague con arreglo a lo que le toca y se acabe la picaresca", explica el concejal de Hacienda, José Masip.
El consistorio tiene constancia de que, por ejemplo, hay vecinos que colocan placas de vado falsas en la puerta de su garaje y no pagan la tasa correspondiente. O que hay cafeterías que sacan mesas y sillas a la calle sin abonar la tasa por ocupación de vía pública, lo que supone un agravio respecto a otros negocios que sí satisfacen este tributo. "La medida será informativa, si la Policía Local detecta una irregularidad, el denunciado tendrá 30 días de plazo para subsanar el fraude y evitar el pago de una multa", añade el titular de Hacienda.
El plan de inspección, que se alargará hasta el año 2015, pondrá especial atención en la actualización de los impuestos del IBI y del IAE tras la reciente revisión catastral, que motivó la notificación de 135.000 recibos.
DELITOS FISCALES // Masip advierte de que el carácter informativo del plan de control tributario quedará aparcado en el caso de que los inspectores municipales detecten posibles delitos fiscales. "En ese caso, lógicamente, se dará parte a quien corresponda, pero la filosofía de la medida es meramente informativa y para que la recaudación de impuestos sea solidaria, más en esta época de crisis", señala el concejal.
