La Diputación de Castellón gestionará los servicios de los municipios de menos de 20.000 habitantes que no dispongan de los recursos necesarios. En el caso de Castellón, la institución provincial podría llegar a tramitar las gestiones de 128 localidades, de las 135 de la provincia. Así, lo contempla el borrador de la reforma de la ley de régimen local, que se encuentra en fase de tramitación, en la Comisión de Hacienda y Administraciones Públicas del Congreso.

En el periodo de un año se someterá a los ayuntamientos a un proceso de evaluación detallada. Si en esa prueba los municipios obtienen un resultado negativo, tanto los servicios obligatorios como mínimos, que actualmente prestan, pasarán a gestionarse desde la Diputación de Castellón, mientras que aquellos que demuestren solvencia podrán seguir tramitando ellos mismos los servicios. Actualmente, la Diputación ya tramita las prestaciones de 40 pequeños municipios de la provincia.

En cuanto al borrador de la ley, el presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, se mostró ayer satisfecho del hecho de que 14 de los 15 puntos de este documento sean los que se aprobaron en la cumbre de Cabanes, en la que alcaldes de toda la provincia y la Diputación fijaron un decálogo de cómo optimizar la gestión de las administraciones públicas para ahorrar costes y dotar el servicio de una mayor eficacia.

“El objetivo es que los servicios, que son un lastre para los municipios, pase a coordinarlos y ejecutarlos la Diputación”, señaló Moliner, quien aseguró que con esta reforma se rebajarán los costes de las gestiones, aunque aún es prematuro para cifrar este ahorro.

CUMBRE // Moliner anunció que este sábado ha convocado una cumbre con todos los diputados, coincidiendo con el primer aniversario de su toma de posesión, para plantear “una estrategia que nos prepare para ser los primeros en ofrecernos como la nueva Diputación que está planteando la reforma de la administración”. H