Insultar al conductor del autobús urbano u organizar alboroto, viajar sin el tíquet correspondiente o ensuciar los vehículos serán faltas graves que acarrearán multas de entre 21 y 50 euros. Así lo establece el borrador del nuevo reglamento del transporte público urbano que el Ayuntamiento de Castellón ha redactado y prevé aprobar durante las próximas semanas.

La normativa consta de 50 artículos y busca poner fin al vacío legal que existía hasta ahora en esta parcela cada vez que algún ciudadano remitía una queja o reclamación por el mal funcionamiento del servicio. Los escritos quedaban sin resolver o generaban problemas jurídicos.

La nueva normativa regula aspectos del día a día del servicio como la higiene de los vehículos, la labor del conductor, el tipo de billete o las normas de acceso al autobús. El reglamento no solo focaliza la carta de derechos y obligaciones en el usuario sino también en el propio chófer y en la empresa concesionaria.

LOS MENORES NO PAGAN // Por ejemplo, se establece que los niños menores de siete años no pagan billete, pero tampoco tienen derecho a asiento, del mismo modo que está prohibido subir al autobús cargas superiores a los 30 kilos o acceder al mismo fuera del perímetro de las paradas oficialmente disponibles.

El reglamento recuerda en su artículo 25 los requisitos para obtener el bono joven o el pase para jubilados. También faculta al conductor del vehículo en su artículo 31 para disponer de cambio hasta un importe máximo de 20 euros si se adquiere un billete ordinario, y de 50 euros si se compra un bono. La norma permite subir coches para niños siempre que se accione el freno.

El conductor tiene plena libertad para impedir el acceso al autobús de personas borrachas o en el caso de que todos los asientos estén ocupados. El borrador impulsado por la concejala de Movilidad, Carmen Albert, está en manos de los integrantes del Foro de Movilidad, que en los próximos días deberán entregar sus propuestas de mejora. El reglamento podría ser aprobado el próximo julio. H