El año 2012 ha sido malo a todos los niveles y el sector de la automoción en Castellón no ha sido una excepción. Los datos facilitados ayer miércoles por la propia patronal Astrauto revelan que la capital, Vila-real, Almassora y Burriana han liderado las matriculaciones de vehículos en la provincia en el pasado ejercicio, marcado por la bajada de ventas, un 40% menos que dos años antes.
El ránking facilitado por la Asociación de Talleres y Reparadores de Automóviles y Otros de Castellón (Astrauto) refleja que la capital acumuló en el 2012 las cifras de matriculaciones de turismos, un total de 1.647 unidades, una cifra que contrasta con las 2.622 alcanzadas en el 2010, o con las 6.357 acumuladas en el lejano, y a día de hoy inalcanzable, 2007.
Tampoco es más halagüeño el panorama en Vila-real, que cerró el pasado 2012 con solo 402 matriculaciones, frente a las 672 del 2010, o las 1.890 del 2007, una tendencia bajista que se acumula en todos los municipios.
Y es que los datos oficiales de ventas reflejan que en el 2012, en la provincia se comercializaron 4.610 unidades de turismos a particulares, contrastando con los 7.627 que salieron de los concesionarios en 2010. Los concesionarios califican sin ambages los registros de “muy malos”, y unen otros factores, como el hecho de que el grueso de los modelos que se venden tienen un coste medio muy inferior al de hace unos años, de modo que los márgenes “se estrechan al máximo, hasta hacerse insoportables”. Aun así, solo hay un segmento que se salva, el de los 4x4, normalmente de alta gama, que cerró 2012 con 1.040 unidades vendidas, 140 menos que en el año 2011.
