Incertidumbre máxima en los colegios y entre los padres sobre qué alumnos van a ser beneficiarios este curso de las becas de comedor de la Conselleria de Educación, a apenas cinco días para que se generalice el servicio, el 1 de octubre. Los centros, públicos y concertados --estos últimos también se beneficiarán de las subvenciones-- tienen ya los listados con las puntuaciones, otorgan un máximo de 20 puntos, pero desconocen el corte que determinará quiénes se quedan sin ayuda. Victorino Bartoll, portavoz de la Asociación de Directores de Primaria de Castellón, explica que “las consultas de muchas familias, ya desesperadas, son diarias, porque de estas dotaciones depende su planificación económica y familiar; muchos nos dicen que si no la consiguen no se podrán quedar”.

En la misma línea, Guillermo Mercader, coordinador de las Ampas de Vila-real, critica “la falta de transparencia y previsión”. “Las solicitudes están presentadas desde julio, ¿por qué no hay una resolución a apenas cinco días de empezar el servicio?”. “Muchos padres están pendientes de saber si tendrán el 70% o el 100% de la beca, y eso provocará que muchos se echen atrás” incide.

En el colegio Jaime I de Castellón, 40 de los 112 solicitantes tienen la máxima puntuación, y no saben “si los de 19 puntos entrarán”, señala Bartoll, su director.

Víctor Selusi, director del colegio Cardenal Cisneros de Almassora, alerta de una nueva bajada de la cifra de comensales este curso. “El año pasado, con la rebaja de las becas, ya se notó, y este año aún más”, dijo. En su centro, el pasado año había 200 solicitudes, este, unas 150. Además, según los directores, “los presupuestos se están haciendo a ciegas, porque no sabemos a cuánto ascenderán las ayudas”. Y queda pendiente la deuda. “Nos deben desde febrero a mayo de gastos de comedor y monitores, y en algunos centros eso supone hasta 70.000 €”. H