La quinta sesión del juicio a Carlos Fabra acabó ayer sin sorpresas y con los dos exaltos cargos del Ministerio de Agricultura negando presiones políticas del expresidente de la Diputación para adelantar los trámites de las licencias de los productos fitosanitarios que fabricaba el por aquel entonces amigo suyo, Vicente Vilar.

La vista, la más densa hasta el momento, contó con los testimonios de hasta 17 personas, entre directores de banco, joyeros, familiares del empresario de Artana y exmiembros del Gobierno de José María Aznar. Precisamente estos últimos fueron los más extensos en sus explicaciones. Juan José Guitián, exsubdirector general de Medios de Producción Agrícola, admitió que Fabra “mostró interés” por los retrasos que sufrían los pesticidas de Naranjax, pero negó que este se aprovechara de su cargo para agilizar la tramitación, como sí estiman tanto la acusación popular (UCE) como Fiscalía Anticorrupción. Guitián dijo que en el Ministerio se decía que Vilar “había estado dando la lata muchísimas veces” por tener paralizadas las licencias, y señaló que en aquella época todos los productos fitosanitarios sufrían retrasos “por la dificultad del proceso y la falta de personal”.

Por su parte, el exdirector general de Agricultura Rafael Milán, quien estuvo inicialmente imputado en la causa, manifestó que el dossier sobre los productos de Naranjax que se aportó como documentación en la reunión entre Fabra, Posada y Prim lo elaboró él de “motu propio”. Explicó que era una reunión para hablar de la posibilidad de abrir un Punto de Inspección Fronteriza (PIF) en el puerto de Castellón: “Viniendo de la provincia, me imaginé que hablarían del tema” de Naranjax, ya que Vilar, añadió, “estaba todos los días en la prensa con injurias constantes a nosotros”.

Pero además de exresponsables ministeriales, la jornada de ayer --que comenzó 30 minutos tarde porque el furgón que traslada a Vilar de la prisión llegó con retraso-- acogió el testimonio de hasta ocho exdirectores de sucursales bancarias. A todos ellos se les preguntó por los ingresos que el chófer de Fabra realizaba en sus distintas cuentas pero todos dijeron que nunca vieron movimientos que pudieran vulnerar la ley. También se escuchó a dos joyeros de la capital, a quienes Vives realizó compras. La acusación quiso saber para quién eran los relojes y sortijas pero respondieron que no lo preguntaron a sus clientes.

El juicio del caso Naranjax se retoma hoy (10.00 horas) con la declaración de varios políticos como Esteban González Pons o el exministro castellonense Juan Costa. Ambos responderán por videoconferencia. H