Los agentes medioambientales y forestales han detectado menos paranys preparados para cazar que otros años. Así lo indicaron fuentes de la asociación española de agentes forestales y medioambientales (Aeafma). “Se ve que la actividad desciende y que se han preparado menos”, constatan.

A ello ha contribuido el hecho de que el parany lleve desde el 2003 en la clandestinidad, el envejecimiento del colectivo y el endurecimiento de las sanciones.

En una primera fase, los agentes pasaron por los paranys para informar a aquellos que estuvieran preparándolos --podando, limpiando o colocando varetas-- sobre la legislación vigente y, a aquellos que estuvieran cazando denunciarlos. “Se ven muchos que este año no han sido preparados o están abandonados ya”, explican. Algo que achacan, a su juicio, a la presión que se viene ejerciendo, a que el montante económico de las sanciones se ha incrementado y a la posibilidad de que el paranyer se vea inmerso en un proceso judicial penal.

En la actualidad, se ha activado ya el procedimiento de vigilancia y sanción más propio, mientras que el anterior era más informativo, sin perjuicio de denunciar si procedía.

El presidente de la asociación de paranyers Apaval, Miguel Ángel Bayarri, apunta que “la gente que practica el furtivismo sabe a qué se expone. En estos momentos, la actividad del parany no está regulada y, si se hace, es por cuenta y riesgo de quien la practica. No podemos abocar a nuestros asociados a la ilegalidad”.

El endurecimiento del Código Penal ha “asustado” a los paranyers, según Bayarri. Gente mayor, trabajadora que nunca ha tenido un tropiezo con la justicia a quien le cuesta asumir verse inmerso en un proceso penal.

CAZA NOCTURNA // “Ya no hay tantos paranys activos como años anteriores”, explican desde Aeafma, aunque haberlos haylos. “Hay gente que caza más de cara a la noche para evitar los controles”, indican, aunque también hay quien los tiene medio preparados y no los acaba de preparar.

La Conselleria --a falta del balance oficial de la primera semana de caza que empezó el 12-- reconoce que sí ha caído mucho respecto a años atrás.

Desde el grupo ecologista Gecen admiten que, comparado con hace once años, ha habido un significativo descenso. Pero “no podemos hablar de que sea residual, ya que hay más de mil activos”, apuntan.

Los ecologistas aseguran haber remitido a Fiscalía los 33 paranys científicos autorizados y medio centenar detectados esta semana. “La semana que viene remitiremos más listados, tanto a Conselleria como al Ministerio”, indican. A partir de ahí, el Seprona y los agentes medioambientales tendrán que inspeccionar. H