Uno de los dos peritos propuesto por la defensa de Carlos Fabra, Juan Alberto Marco, aprovechó las preguntas de las tres partes de la acusación para justificar los ingresos del matrimonio Fabra y desmontar las argumentaciones de los dos inspectores fiscales. Marco explicó durante una de sus intervenciones que el político castellonense obtuvo ingresos por gastos de representación justificados por la Diputación, el PP provincial, el PPCV, el aeropuerto, el club de golf La Coma o la Cámara de Comercio. “Carlos Fabra nunca pagaba los gastos que le suponían representar a dichas instituciones con dinero de las mismas sino que lo hacía con su propio dinero. Era más tarde cuando presentaba las correspondientes facturas para que se le liquidara lo que previamente había adelantado”.

Sin embargo, de inmediato y a preguntas de la Abogada del Estado, respondió que la información sobre estos ingresos se la aportó el propio Fabra y no las entidades a las que se refiere, a excepción de la Cámara de Comercio, que sí que le presentó documentación relativa a las facturas abonadas.

Juan Alberto Marco (Andrés Gurrea, el otro de los peritos contratado por Carlos Fabra no se pronunció en ningún momento) manifestó también que la mayor parte de los ingresos en efectivo procedían de la “caja familiar” y que “el dinero en el bolsillo del señor Fabra era notorio”. Llegados a este punto recordó la venta de diferentes inmuebles y parcelas que realizó el matrimonio Fabra.