El Ayuntamiento de Castellón prevé desembolsar el próximo año 1,3 millones de euros menos en gastos de personal respecto al ejercicio 2009. El proyecto de presupuestos municipales para 2014 que aprobará el pleno del próximo jueves prevé un gasto global en salarios de 49.501.482 euros, dinero del que saldrán los sueldos de los 27 miembros de la corporación; los 20 asesores; los 25 empleados laborales fijos; y los restantes 1.108 funcionarios y personal laboral.
La reducción del gasto en salarios va en consonancia con el recorte de la plantilla municipal. De los 1.166 funcionarios e interinos en nómina en 2009 se pasará en 2014 a 1.133 trabajadores.
El alcalde y los 26 restantes concejales percibirán 840.000 euros frente a los 930.000 euros de hace cinco años. Los asesores ingresarán 622.101 euros, cifra ligeramente inferior a la de 2009.
El grueso del ahorro salarial se dará en dos conceptos: las gratificaciones a empleados, cuya previsión presupuestaria cae de 600.000 a 233.910 euros en cinco años; y los 851.864 euros de gasto por la asistencia médica privada que disfrutaban los funcionarios más veteranos en 2009 desaparecerá para ahorrar 572.089 euros.
Para el próximo 2014, las cuentas municipales contemplan la amortización de 5 plazas laborales correspondientes en su mayoría a jubilaciones que no serán cubiertas: una de administrativo, otra de coordinador censal, médico y chófer del SAMU y la plaza de sacerdote del viejo cementerio.
El equipo de gobierno castellonense cumplió ayer otra etapa más en el proceso para aprobar las cuentas de 2014 al rechazar en la comisión las 16 enmiendas que presentaron los tres grupos de la oposición.
Como ya explicó este periódico, el PSPV-PSOE registró cinco proposiciones que movían de lugar 1,9 millones de euros. Planteaban un Plan Municipal de Empleo, aumentar las prestaciones económicas para vecinos sin recursos económicos, elevar la cuantía de los presupuestos participativos, ofertar una red de viviendas para realojos y eximir el IBI y otros impuestos a afectados por desahucios. El Bloc-Compromís pedía en sus tres enmiendas eliminar dos plazas de asesor y reducir la contratación de informes externos sobre el PGOU, así como más dinero para presupuestos participativos, becas y campañas de normalización lingüística. EU, por último, planteaba en sus ocho enmiendas más dinero para emergencia social, promover la rehabilitación de viviendas, un Pacto Local por el Empleo, sustituir la teleayuda por la teleasistencia o crear un camping municipal o dar más dinero a oenegés.
El portavoz adjunto municipal del PP, Juan José Pérez Macián, justificó el rechazo de las 16 enmiendas en que ninguna de ellas “es coherente y de utilidad a lo que la ciudadanía necesita” y porque gran parte de ellas son contrarias al plan de mandato del alcalde Bataller. Macián acusó a la portavoz del PSPV, Amparo Marco, de plantear exenciones fiscales “que no permite la ley”, una crítica que extendió a Carmen Carreras (EU). A Enric Nomdedéu (Compromís) afeó que rechace el proyecto de Hábitat Artístic. H
