El grupo municipal socialista de Castellón llevará al pleno la supresión de unidades escolares. La moción presentada ayer promueve la convocatoria de un Consejo Escolar Municipal extraordinario para elaborar alegaciones al arreglo escolar, a través de un recurso de reposición, así como analizar las acciones de protesta a emprender ante la Generalitat. También se propone reprobar la gestión del concejal de Educación, Vicent Sales, que se comprometió a mantener algunas unidades.

“El denominado arreglo escolar es un golpe letal para la continuidad de algunos centros escolares públicos. La eliminación de unidades escolares supondrá una nueva masificación de las aulas y, por lo tanto, tendrá una repercusión negativa sobre la calidad educativa”, afirmó el portavoz adjunto municipal del PSPV-PSOE, Pep Grau. Los socialistas consideran que también se atacan directamente los derechos lingüísticos del alumnado, que tendrá más difícil elegir la lengua vehicular de su aprendizaje.

Por su parte, la portavoz adjunta municipal del Bloc-Compromís, Ali Brancal, presentó una declaración institucional contra la supresión de plazas escolares en la capital. Brancal también aseguró que los diputados de Compromís en Les Corts preguntarán a la Generalitat qué pasará con el proyecto de remodelación del colegio Maestro Canós presentado hace cuatro años. “Los planos están hechos y la licencia de obras, concedida”. H