La empresa Becsa ha iniciado en fechas recientes las obras de mejora de la carretera CV-147, que atraviesa el Desert de les Palmes, para convertirla en una pionera ruta cicloturista en un momento en que esta modalidad deportiva de aficionados gana adeptos.

Los trabajos fueron adjudicados por la Diputación por un importe de 1.297.639 euros tras ser negociados con el alcalde de Castellón, Alfonso Bataller, y concluirán dentro de un mes. Se realizan labores de pavimentación y refuerzo del firme, hormigonado de cunetas, desbroces y demoliciones, ubicación de la señalización horizontal y vertical, un área de descanso en lo alto del Desert y dos grandes monolitos en las dos entradas del puerto desde Castellón y Benicàssim.

La ruta cicloturística también contará con señales informativas para el ciclista en las entradas, la cima y los puntos kilométricos. Del mismo modo, se detallará el perfil del trayecto, su desnivel o la distancia hasta el punto más elevado. Los trabajos persiguen mejorar la seguridad de conductores y ciclistas en uno de los puntos más transitados por el deporte de las dos ruedas durante los fines de semana.

Hasta hora, la CV-147 presentaba en el tramo entre los términos Castellón y Benicàssim múltiples grietas y desperfectos en la calzada y carecía de arcenes.

No es ésta el única actuación en materia de promoción del entorno del paraje natural del Desert de les Palmes. En el ermitorio de la Magdalena --término de Castellón--, la Conselleria de Cultura ultima la adjudicación del contrato de restauración del yacimiento de Castell Vell.

El objetivo es culminar la rehabilitación de todo el complejo histórico en el verano del año 2016. La quinta y última fase se activará a finales de este año y consistirá en la consolidación de la muralla oeste y la construcción de un centro de interpretación que acoja todas las piezas que se han hallado. El Consell pretende captar 240.000 euros del Gobierno que se sumarán a los 605.000 previstos en el plan director para llegar a 845.552 euros. H