La sentencia cuenta con el voto particular concurrente de Nicolás Poveda, que aunque no discrepa con sus compañeros de lo dispuesto en la sentencia, entiende que debería haberse hecho constar que cuando Txeroki fue detenido en Francia se le intervino un documento en el que se reconocía la falsedad de las torturas que los miembros del Elurra dijeron haber sufrido tras su detención.

Durante la vista, Txeroki se negó a declarar y aseguró, en euskera, que la Audiencia Nacional no tenía autoridad para juzgar a los vascos.

EXCULPADO // En el banquillo de los acusados se sentó también Joseba Antón Aranibar, considerado lugarteniente de Txeroki, aunque ha sido exculpado por esta sentencia, porque cuando se produjo este atentado se encontraba preso en Francia y, si bien era el responsable del comando Elurra (al que se atribuyó esta acción), y disponía de las armas y explosivos que pudo “haber proyectado entregar” a los miembros de ese grupo, ya fue condenado por ese delito en Francia. Además, por haber estado preso en Francia en esas fechas, “no tuvo dominio del hecho y no puede ser considerado autor”. H