Un total de 250 DNI 3.0 vieron ayer la luz en las comisarías de Vila-real y Castellón. Los nuevos documentos de identidad, más difíciles de robar por sus complejos sistemas de seguridad, comenzaron a expedirse desde las 8.00 horas.

El recién estrenado carné funciona como una gran plataforma, con amplia capacidad para instalar distintas aplicaciones y tres microchips integrados, que permitirán en un futuro almacenar datos como los relativos al carné de conducir y la seguridad social.

Desde ya, cuando los castellonenses viajen al extranjero, no tendrán que hacer largas colas en las cabinas de extranjería del aeropuerto. El registro de sus datos no tendrá por qué hacerlo un policía de forma manual. Bastará con pasar el DNI por una máquina, que recogerá de forma automática todos los datos personales de interés. Fácil, rápido y sencillo. Todo un descubrimiento.

A simple vista, lo que primero llama la atención del nuevo carné es que el tamaño de la fotografía se ha duplicado y que los colores han cambiado. Ahora predominan el salmón y el azul. Ni rastro del amarillo que tenía el anterior documento, ni tampoco de la bandera española. “A mí, estéticamente, me gustaba más el anterior. Era más original y la foto más pequeña. Siempre se dice que en el carné no se sale bien y ahora todavía se nos ve más”, valoran Paco y Aida Cánovas, vecinos de la Vall d’Uixó, a la salida de comisaría. Para gustos los colores, pues a María José Ríos, natural de l’Alcora, le parece “muy bonito” el nuevo modelo. Todos coinciden, en cambio, en valorar la extrema seguridad que ofrece el nuevo modelo.

Al funcionar con multitud de claves, resulta más difícil usurpar la identidad de una persona. Un delito que, a partir de ahora, parece que será misión imposible.

Los modernos documentos, de los más avanzados de Europa, se expedirán a todos aquellos que deban renovar su carné. También a quienes hayan sufrido un robo o pérdida. La cita se reserva en el 060 o en la página www.citapreviadnie.es. H