La asociación vecinal Unión por la Marjaleria reclama una reunión con la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, para acabar con el limbo jurídico existente en la zona, ya que señalan que “después de más de 100 días de gobierno, y a pesar de las promesas electorales, aun no conocemos las medidas que se van a aplicar en la zona”.

Los residentes de este área refieren una visita de la socialista antes de las elecciones durante la cual, indican desde este colectivo, les prometió “que iba a regularizar las construcciones sin licencia y que iba a parar las multas y expedientes”.

En la base del problema está el no desarrollo del plan especial de la Marjaleria, del año 2006 --de las cinco fases que contemplaba solo se completó la primera--, y la anulación del PGOU en el 2008. “Desde ese momento, el asunto ha sido una patata caliente que no se ha resuelto”, indican desde la asociación, lo que está provocando “un grave problema, urbanístico y humano” a los vecinos.

MULTAS MUY ALTAS // Y es que la proliferación de construcciones en suelo cuya consideración jurídica no está clara provocó que en la anterior legislatura se comenzó a denunciar a los residentes por infracción urbanística, con sanciones que “llegan a los 50.000 euros”. Esto hace que las familias afectadas estén “en riesgo de exclusión social, con amenazas de derribo”, e incluso con apertura de diligencias.

Asimismo, denuncian la arbitrariedad de las sanciones, puesto que “no todas las viviendas son multadas; se multa a una y a la que está al lado, no”.

Por ello, desde Unión por la Marjaleria instan al actual equipo de gobierno a encontrar la forma de regularizar esta zona para que “pueda ser como un barrio cualquiera de Castellón, con sus mismos servicios”. No en vano, señalan que pagan “más IBI que en el centro de la ciudad”.

“Esperamos que la alcaldesa atienda pronto nuestra petición”, indicaron ayer desde la asociación vecinal de la Marjaleria. H