Los líderes de las principales formaciones castellonenses y valencianas bajaron ayer --víspera de la jornada de reflexión de las elecciones en la comunidad vecina-- por enésima vez a la arena política, bien para exhibir de nuevo sus posturas sobre la cuestión catalana, como es el caso del president socialista Ximo Puig, o el líder del Partido Popular en Castellón, Javier Moliner, o bien para ignorar el problema --y de paso, volver a disentir de la línea marcada por su superior, Puig--, como hizo la vicepresidenta del Consell, Mònica Oltra. Mientras, la presidenta del PPCV, Isabel Bonig, repitió de nuevo en Alicante sus acusaciones a la izquierda del tripartito de ser procatalanista.

Puig mostró en la apertura del curso de la Universitat Jaume I (UJI) de Castellón su preocupación por la “situación que se está viviendo en Cataluña”, pero achacó el problema a la actitud de Mariano Rajoy respecto al proceso electoral que culminará el próximo domingo, porque “tampoco nos está beneficiando”. Añadió que quieren “una solución de diálogo”, apreciación que remachó al afirmar, por Mariano Rajoy, que “el que no quería diálogo sabe que el lunes tendrá doble ración de diálogo, porque si no hay diálogo no hay solución”.

Javier Moliner subrayó el “giro radical” que las políticas de Artur Mas han provocado en la imagen de Cataluña, “hasta tal punto que en nada preocupan las necesidades de los ciudadanos, los problemas cotidianos”, después de “esconderse y utilizar la senyera catalana para tapar sus miserias políticas”. Y defendió que “las elecciones catalanas deberían centrarse en programas que hablaran sobre los problemas que de verdad preocupan a las personas: el empleo, la atención social o la educación”, pero “el independentismo ha generado un conflicto que es artificial”, aseveró.

La popular Isabel Bonig centró sus referencias a la cuestión catalana en sus críticas al tripartito autonómico al asegurar en Alicante que “los partidos de izquierda que gobiernan en la Comunitat no creen en esta tierra, y prefieren ser catalanes de segunda que valencianos de primera”.

Por último, la vicepresidenta del Consell y líder de Compromís, Mònica Oltra, reivindicó que “el ejecutivo autonómico está más preocupado por atender a los desamparados que por la unidad de España, que no corre peligro”.

Oltra se pronunció así ante la petición de que valorara la vigilia convocada para la tarde de ayer en Valencia por el cardenal Antonio Cañizares, precisamente, para rezar “por España y su unidad”. H